Cómo cuidar la piel con acné después de los 30 años

Cabello por María Macías

En el momento en que el acné comienza a afectar nuestra cara o cuerpo a principio de adolescente, suele ser considerado como un problema pasajero, superable una vez que maduremos. Sin embargo, algunos estudios recientes demuestran que nuestra salud de la piel es un tema más complejo, y que muchos adultos mayores de 30 todavía tienen que lidiar con el acné y sus síntomas.

Si eres de los que está luchando con el acné en la edad adulta, sabemos que la tarea de encontrar el tratamiento adecuado puede resultar agotadora. Por eso, queremos compartir algunos consejos que podrían ayudarte a controlar el problema de acné y mejorar tu salud de la piel.

Limpieza

Las afecciones de acné suelen tener una semilla común: la acumulación de suciedad y grasa. Por ende, para prevenir el brote de acné, es indispensable mantener una buena rutina de limpieza. Esto significa que es necesario:

  • Lavarse la cara dos veces al día con un jabón suave.
  • Pelar suavemente la piel de la cara una vez a la semana.
  • Limpiar y refrescar la piel con un tónico después de lavarse la cara.
  • Aplicar una mascarilla refrescante al menos una vez por semana.

Por otro lado, es importante considerar que también hay otros factores que contribuyen a la obstrucción de los poros. Algunos ejemplos son el maquillaje, el sudor, la grasa y la suciedad acumulada durante el día. Por consiguiente, no sólo es importante seguir una buena rutina de limpieza facial, sino también mantener la piel con las manos limpias y la ropa interior limpia y cambiada con regularidad.

Hidratación

Otro consejo clave para cuidar la piel con acné después de los 30 años es la hidratación. Esto es algo especialmente importante en adultos porque, a medida que envejecemos, nuestra piel pierde su elasticidad y su capacidad de retener la humedad. Por este motivo, es vital mantener un buen nivel de hidratación para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel.

Es recomendable hidratar la piel con una crema eficaz para ello. Elige una crema hidratante con ingredientes naturales como el aloe vera, la manteca de karité o el aceite de coco que ayudarán a proteger e hidratar la piel. Puedes aplicar la crema una o dos veces al día para mantener la hidratación y además, reducir las espinillas asociadas al acné.

Humectación

A menudo, el exceso de grasa se confunde con la falta de hidratación, pero hay que aclarar que son dos problemas muy diferentes. Por esta razón, la humectación es un paso muy importante para el cuidado de la piel con acné. Esto significa que es necesario mantener nuestra piel con un equilibrio de agua-grasa preveniendo así la acumulación de grasa y la formación de bacterias.

Para lograrlo, hay que usar una crema limpiadora con ingredientes suaves y eficaces. Una buena opción es usar geles especialmente diseñados para pieles con acné. Elige uno que contenga ingredientes como el ácido salicílico, el peróxido de benzoilo o la niacinamida para limpiar la piel de manera suave e incluso minimizar la aparición de señales de acné.

Exfoliación

Como ya hemos comentado, la exfoliación es una excelente forma de mantener la piel limpia y mucho más joven. Esto se debe a que, al exfoliar la piel, se eliminan las células muertas que se acumulan en los poros y esto ayuda a prevenir la formación de acné.

Se recomienda exfoliar la piel una vez a la semana. Esto significa usar un jabón suave para limpiar la cara antes de exfoliarla. Eligiendo un producto con ingredientes como la vitamina E, el ácido láctico o la arcilla, se mejora la absorción de los productos hidratantes y se reduce la aparición de acné.

Protector solar

Aunque pueda parecer extraño, el uso de protector solar resulta esencial para una buena salud de la piel. Esto se debe a que los rayos ultravioleta son una de las principales causas del envejecimiento prematuro de la piel, especialmente en adultos. Por otro lado, el protector solar también puede ayudar a prevenir el acné ya que ayuda a bloquear los rayos que destruyen nuestros poros.

Por ello, es importante usar protector solar diariamente para proteger la piel de los rayos nocivos del sol. Elige un producto con un factor de protección solar (F.P.S.) alto, para una mayor protección. Para aquellos que sufren de acné severo, se recomienda el uso de productos con F.P.S. superior a 30.

Suplementos

A pesar de que una buena rutina de cuidado de la piel es una excelente forma de controlar el acné, hay ciertos suplementos que pueden ayudar a mejorar la salud de la piel desde el interior. Por ejemplo, los suplementos de probióticos ayudan a mejorar la producción de ácidos grasos y pueden tener un efecto positivo en el acné y en la piel en general, al igual que la vitamina A, la vitamina C y la vitamina D.

Sin embargo, aunque se recomienda el uso de estos suplementos para el cuidado de la piel, es importante recordar que cada organismo es diferente, por lo que es aconsejable consultar al médico antes de tomar cualquiera de estos suplementos.

Conclusión

En conclusión, el acné en adultos mayores de 30 años no tiene que ser una pesadilla. Con una buena rutina de higiene y un tratamiento adecuado, puedes recuperar tu salud de la piel con la ayuda de unos sencillos pasos. Consistencia, paciencia

Sobre el Autor
María Macías

es un profesional de maquillaje artista cuyo trabajo ha aparecido en la pista de aterrizaje y la alfombra roja, así como espectáculos y revistas nacionales e internacionales de televisión. María acredita su larga y exitosa carrera en la industria a su habilidad innata para ver y resaltar la belleza en todo el mundo. Al crecer, su pasión por su futura profesión fue provocado por su madre y sus dos abuelas, todas las esteticistas europeos entrenados